viernes, 17 de junio de 2011

Sobrepeso

Me he concienciado de que tengo sobrepeso. Hace algo más de dos semanas, mis rodillas comenzaron a darme la lata, sobre todo la izquierda. Me daba miedo salir a correr y que la cosa fuera a peor aunque, por otro lado, comenzaron a dolerme cuando llevaba quince días sin correr por lo que no era debido a una lesión deportiva. 

Analicé la situación y descubrí que el mayor problema estaba en una mala postura en el trabajo. Resuelto ese punto (cambié la postura, no es que haya dejado el trabajo), continué con el análisis de causas. Un día, medio acongojado u otra palabra que suena parecido, salí a trotar y me sentó bien. «Eso es bueno», pensé. Seguí analizando la situación. Sopesé la artritis pero no me cuadraban los síntomas. (Sí, ¿qué pasa?. Que uno ya tiene una edaaaad y piensa en todo) ¿Condromalacia rotuliana? Va a ser que no. Llamé a House y me dijo que tendría que hacerme una punción lumbar, y un TAC pero que probablemente sería lupus. Descarté a House. Como tampoco me dolía en la zona del menisco, descarté al susodicho. Vamos, que después de mucho pensar, me quedé como estaba, sin saber qué tenía. 

Aunque no pude identificar el problema, conocía su efecto (dolor en la rodilla), por lo que me puse a buscar la causa. Apliqué la navaja de Occam y casi me corto un dedo. ¿Lo más sencillo es lo más plausible? Pensé entonces en los dos factores que podrían haber desencadenado el problema. Que los músculos fueran perdiendo masa, era el primero. El segundo, que tenía sobrepeso. Bueno, pues vamos a solucionar los dos a la vez. Claro que quizá haya sido un análisis un poco arbitrario porque, ¿cuál es la solución común a ambos problemas? ¡Correr largas distancias a ritmo aeróbico! 

Como diría mi amigo Antonio: «¡Moooola!»

En el día de hoy peso 90 kilos y, para mi estatura, el índice de masa corporal es de 28,4. Hasta 30 no es obesidad pero lo recomendable es mantenerse entre 20 y 25. Claro que el principal motivo que me concienció de que debía bajar unos kilos fue esta imagen:




¿Lo has leido bien? ¿El último punto de la columna de la derecha? Sí, ese, el que dice: «Diminishing Sex Drive» ¡Disminución del deseo sexual! ¡¡¡Hay que bajar peso ya!!! 

No se trata de mejorar para correr mejor. Se trata de sentirme bien y de poder seguir corriendo muchos años. ¡Y de que no diminisha el sex drive ese!

Salud, kilómetros y ... sex drive ;-D

1 comentario:

banderas dijo...

Ahora entiendo el título de una canción del querido Mick titulada "Sex drive" y que yo había traducido como "Sexo inducido"!!!! XDDDDD

Por cierto, ignoro quien es tu amigo Antonio, pero es un puto impresentable... mira que desearte hondonadas de kilómetros a ritmo aeróbico!!! ;-)

Salud y kilómetros!