lunes, 11 de abril de 2011

Mi Vig-Bay 2011

¿Correr una media la semana antes de un maratón? Pues sí. Pero hay que puntualizar que lo que la mayoría de los corredores entiende por correr no es lo mismo que lo que entiendo yo. He terminado la Vig-Bay en 2 horas exactas, de menos a más, tal y como me había propuesto. Mi plan de entrenos me indicaba correr 90 minutos pero no creo que por hacer media hora de más me vaya a cargar el maratón. O tal vez sí. El caso es que ya está hecho. Me marqué unos ritmos para llegar en 2 horas y corrí la Vig-Bay más cómodo que nunca.

Antes de la salida, saludo a los correlegas del club, al gran Jotaeme, a Jecarqui, a Javi y a Chechu.

La salida, con cajones, aunque todos nos pusimos donde nos salió de los ídem (o de algo con un nombre similar). Veo y saludo a mi cuñado. Me situo al lado de Fran y de Fernando. Fran me dice que va a terminar en 2 horas y pico y que tiene un tobillo mal.

Vuelta de 3 km a Samil. Esperaba ver venir de frente a Pedro Nimo cuando observo que la gente ¡había invadido el carril contrario! ¿Habían cambiado el recorrido? Pues no. Una moto de policía con las luces y las sirenas abrió paso a los gacelos que iban en cabeza. Vuelta en la rotonda. Veo a Charly parado en la acera mirando cómo vamos pasando los corredores. Me acerco a él, le saludo con un apretón de manos y me responde con una enorme sonrisa.

Voy controlando el ritmo para hacer el primer diez mil en una hora, a 6'/km. Fran, con el que compartí un par de kilómetros, se marcha hacia adelante. Me cruzo con Ángeles y Evaristo. Nos saludamos. Terminada la vuelta, enfilo hacia O Bao. El día se abre para dejar paso al sol y a un cielo con pocas nubes. No hace demasiado calor.

Cuesta de Canido. Al llegar arriba oigo una voz que dice: «Ánimo, marisqueiro!» Doy las gracias a la amable desconocida y sigo corriendo.

Llego al alto de Mide. Se acabaron las cuestas. Me regulo para cumpir objetivos. En el avituallamiento del km 10 me tomo un gel. No lo necesito pero quiero asegurarme de que a mi estómago le sienta bien puesto que es el que voy a llevar a Madrid. Bebo un cuarto de litro de agua, igual que hice en el km 5 y que haré en el km 15. El crono me marca 1 hora exacta. Es el momento de empezar a correr un poco más rápido. Los 11 kms que faltan tengo que hacerlos en una hora. Empiezo a adelantar gente.

Kilómetro 10 y medio. No aguanto más. Falta una hora hasta la meta.Tengo que parar a mear. ¡Qué alivio! En el kilómetro 11 y medio veo a Fran parado en el arcén. Me detengo a su lado y le pregunto por su tobillo. Me dice que está bien pero que está esperando por Doris, que tuvo que hacer una parada «técnica». Arranco de nuevo. Oigo a una chica que me saluda llamándome khene. Me dice que es Inma (yo lo entiendo así). La saludo pero sin terminar de «centrarla». He necesitado más de 30 horas para recordar quién era. Se trataba de Paqui (que se había presentado por el nick de CenG), que estaba corriendo su primera media.

Sobre el km 12 nos adelanta un hombre que va en monociclo. En serio. Era un monociclo con una rueda enorme, como de un metro de diámetro. Quedamos todos embobados viendo cómo nos pasaba.

Llego a la bajada a Playa América. Una mujer nos ofrece una ducha, pulverizando agua con una manguera. Me refresco y le doy las gracias. En Playa América está el tercer avituallamiento. Tras coger el botellín de agua veo que se acerca un jinete. Sigo corriendo y oigo los cascos del caballo detrás de mí. Giro la cabeza (por si acaso) y compruebo que va por un lateral.

Sin el peligro de ser aplastado por un caballo, compruebo el ritmo. Tengo que recuperar el tiempo perdido en las paradas. Aprieto un poco. Llego a A Ramallosa y veo a Rubén con la cámara en la mano. Sonrío para la foto. Me hace un gesto dándome ánimos. Un poco más adelante siento un pequeño bajón. El ritmo se va manteniendo. Ya se ve Baiona.

A falta de un kilómetro aprieto el acelerador. Bajo de los 5'/km pero aguanto bien. Falta medio kilómetro. Aprieto un poco más, por debajo de 4'45"/km. Estoy llegando. Sigo con la progresión... Un último empujón... Entro en meta corriendo a 3'27"/km... Mi crono me marca 2h00'07". ¡Objetivo conseguido!

Tras recoger lo que nos daban en el avituallamiento de la llegada, salí de la zona de meta. Me encontré con Antonio y  fuimos juntos a buscar a mi chica y a los niños. Ella me preguntó: «Te sientes capaz de correr otros 21 km ahora». «Sí», le mentí yo...

Dentro de 6 días, el Maratón de Madrid.

4 comentarios:

Antonio Martínez dijo...

Un entreno estupendo. Estou alucinado coa cantidade de auga que podes tomar na carreira. Sorte no Mapoma.

banderas dijo...

Pues yo, ya sabes, también clavando ese peazo entrenamiento en compañía... y mira que se echa en falta cuando hago mis largos dominicales!!!

Me hizo gracia lo de "Inma" en vez de "Vilma"... no sé qué tal le iría, pero antes de salir la vi muy animada.

Nos vemos en Recoletos ;-)

khene dijo...

Cando vamos correndo gastamos algo mais de 1 litro de auga cada hora. Cando fai calor, o doble ou o triple. Os mellores tempos que fixen nunha media (e chegando mais descansado á meta) foi cando bebín bastante nos avituallamentos. Se enxuagas a boca ou tomas so un grolo, o estómago non o bota para abaixo e comenza a deshidratación. A min, a deshidratación aféctame moito. E para Madrid dan bo tempo para o fin de semana. No Mapoma beberéi un par de litros de agua (e será pouco).

khene dijo...

La adelanté en el kilómetro 11 y le saqué 15 minutos en meta. Creo que empezó demasiado fuerte y que Playa América le cobró peaje.
Nos vemos en Recoletos ;-)