lunes, 17 de noviembre de 2008

San Martiño 2008: Objetivo conseguido

El sábado por la mañana llegué al Pabellón de Os Remedios en busca del dorsal. Todo fue muy ágil, como en otras ediciones. Como tenía chip amarillo y se habían quedado sin chips negros, me cambiaron el número de dorsal para poder entregar el chip asociado a mi dorsal a otra persona.

Pasé todo el día pateando Ourense. A la hora de cenar, pasé de hidratos y me cené una hamburguesa en el McDonalds. Por la mañana tomé un desayuno «ligero» porque faltaba solamente hora y media para la carrera: Melón, piña, 1 plátano, zumo de naranja, tortilla, un croissant, churros, pechuga de pavo, unas nueces, unos manises, un café y un vasito de agua.

Salgo con el tiempo justo y me encuentro con dificultades para aparcar el coche. Mientras buscaba sitio, me pareció ver a Poetinmotion (el corredor antes conocido conmo Tette) calentando por las calles ourensanas. Por fin aparco y entrego los dorsales que había cogido el día anterior. Banderas estaba muy nervioso. Pero que muy nervioso.

Intento calentar pero no quedaba tiempo. Dos o tres minutos de trote, un par de sprints y para la salida. Banderas y yo nos situamos hacia el final de los casi 3000 participantes. Dan la salida. Al principio íbamos juntos hasta que vio a una conocida y salió disparado a saludarla (le pierden las faldas XD). Lo perdi de vista. Aceleré un poco para alcanzarlo pero ya no lo volví a ver en toda la carrera. Por lo que me comentó después, lo adelanté y no nos vimos. Del recorrido no puedo añadir mucho. Me tropecé con Mr.Dixie, siempre sonriente. También me saludó un corredor que se identificó como «un lector anónimo» (un saludo, lector anónimo). Con nadie más. La carrera se me hizo bastante llevadera pero eché de menos encontrarme con más amigos y conocidos. Al fin y al cabo, para eso voy, no para ganar XD.

Las calles estaban bastante vacías y, donde había gente, nadie aplaudía. Animé en dos o tres ocasiones a la gente para que nos aplaudieran y cuatro o cinco hicieron un intento con desgana ¡Qué sosos! Unos niños se pusieron para que les «chocáramos las manos» y así lo hice.

Los avituallamientos en mitad de carrera, bien puestos. La llegada estupenda, con mucha animación. Conseguí mi objetivo de 48 minutos. Saludé a Charly y me alegré mucho de verlo de nuevo en las carreras con su «problemilla» como lo llama él. También saludé a wottle, aunque me quedé con las ganas de preguntarle si va a intentar de nuevo la San Silvestre de Madrid (este tío es mi ídolo). Banderas estaba por allí saludando a diestro y siniestro. Como relaciones públicas no tiene precio.

La entrega de camisetas, dorsales y «vituallas» un desastre. Cuando vi aquel mogollón decidí pasar de bebidas, de mochilitas de plástico y de raquetas de playa y traté de ir hacia la salida. Tampoco podía pasar. No nos movíamos. Incluso no había lugar para salir sin coger la camiseta. Desde las furgonetas de los refrescos empezó a gritar «¡Viva San Martiño!» y «¡Hay para todos!». Fue algo vergonzoso, sobre todo porque el año pasado habían tenido una organización perfecta y este año cambiaron para peor. Si algo funciona, ¿por qué hay que cambiarlo? Conseguí salir, me dieron la camiseta, un archivador de CDs,unos lápices de colores y un cuadernillo para pintar para los niños.

A la salida saludé a Irdam. Banderas se fue corriendo a una comida familiar. No vi a nadie más de Correr en Galicia. Yo también me marché rápido para llegar al hotel y ducharme dentro de la hora acordada con la recepción. Después, me fui con mi familia a comer a Allariz y a dar un paseo por «O Rexo».



El lunes salí a correr un rato. Fue un trote de 30'. Hacía mucho frío y llevé puesto el chándal.

Próxima carrera: el domingo en Mesoiro. A ver si allí me encuentro con los amigos que no vi en Ourense.

Próximo objetivo: Media Maratón Volta A Ría de Ferrol.

>^-^<

1 comentario:

Grimo runner dijo...

Pues a mi me ha pasado igual, a esta iba solo y no vi a nadie conocido, asi que fue una carrera un poco sosa, de lo demás salvo el frio que pase esperando para salir todo genial. Un abrazo.