domingo, 8 de junio de 2008

Día 42: Renacimiento

Un día por cada kilómetro recorrido. Es el tiempo que he estado sin entrenar. La cifra ha sido una casualidad.

El domingo, después de uno de esos fines de semana en que piensas que no has podido «recargar las pilas», me saqué de encima toda la tontería acumulada y comencé a entrenar de nuevo. Cuando estaba llegando a casa calculé cuántos días había estado sin correr. Hoy hacía el día 42 (bueno, ayer, porque por la hora que es, esto lo voy a publicar después de las 12 de la noche).

Las sensaciones son de pesadez. Salí a buen ritmo, casi con chulería, pero a los cinco kilómetros mi cuerpo me recordó que a mis piernas le había robado muchos kilómetros. Especialmente la pierna izquierda.

Terminé con la lengua fuera pero con la satisfacción de haber llegado a casa todo sudado después de haber estado una hora corriendo. Necesitaba esta carga de endorfinas y serotonina. No me había dado cuenta de cómo la echaba de menos. Me siento renacer de las cenizas. Mañana, más.

2 comentarios:

banderas dijo...

Enhorabuena por tu regreso de las cenizas ¡Oh, Fénix de los atletas! ;-P

Bromas aparte, creo que has hecho muy bien dejando esa larga temporada de descanso. Ahora, a empezar como si nunca antes hubieras corrido... o casi... cogiendo poco a poco fondo y ritmo... te lo dice uno que no lo hizo así y luego le pasó lo que le pasó.

¡Salud y kilómetros! ;-D

Bestiario dijo...

Bienvenida al mundo de las camisetas mojadas, perdón, sudadas, enfin.... ya me entiendes, mejor me callo que hoy lo relaciono todo con el sexo.