miércoles, 28 de julio de 2010

La luciérnaga y una más

Eran ya casi las once de la noche cuando salí a correr. El ambiente estaba caldeado en recuerdo del día de calor que habíamos tenido. Volví a hacer el mismo recorrido de ayer pero esta vez me atreví a seguir por el paseo de O Burgo, por mi recorrido habitual, bordeando las casetas y las atracciones de la fiesta. Desde lejos me pareció que no había demasiada gente. Al cruzar el paso de peatones y acercarme al paseo me di cuenta de mi error. Como ya estaba allí, decidí continuar. Fue un recorrido en zig zag, que parecía más un slalom que un rodaje. Corrí esquivando a grupitos de «lolitas» con su maquillaje y sus minifaldas, a padres de familia con sus niños pequeños, a chavalotes buscando «caza femenina», a un grupillo haciendo botellón, a cientos de personas, ... Cuando iba a rebasar la fiesta me encontré con una alambrada que me cortaba el paso. Habían instalado la «base de lanzamiento» de los fuegos artificiales en medio del paseo. La única manera de seguir adelante era meterme de lleno entre las casetas y la muchedumbre. La segunda opción era dar la vuelta y volver por donde había venido... y así hice. Otra vez el slalom. Un adolescente le pedía algo a la gente. Al llegar a su altura también me preguntó a mí: «¿Tienes un cigarro?». Flipé.

Escapé como pude del entorno de la fiesta, crucé la calle y regresé a la tranquilidad de la noche. Cuando estaba llegando a donde había visto ayer la luciérnaga, pensé en si la vería también hoy. No, claro que no la iba a ver. No iba a quedarse allí quieta todo el día sin moverse. De repente...¡sorpresa! Allí estaba la luciérnaga, en el mismo lugar que ayer. Y, a dos metros de ella, otra lucecita verde brillaba en la oscuridad. Seguí corriendo hacia la luna llena, como un lobo calvo y gordito, por el sendero de luz plateada que la luna iba pintando frente a mí, camino de mi hogar.

lunes, 26 de julio de 2010

Pequeño rodaje nocturno

¡Qué calor hace! Ayer salí a rodar a las 11 y pico de la noche y todavía hacía calor. Unas horas antes había llegado de Vigo donde había ¡8 grados más de temperatura! Estrené la camiseta Puma que me compré en Plymouth el fin de semana pasado. Es muy chula, negra con un dibujo degradado rojo en la parte inferior.

Salí a correr sin reloj. El recorrido fue sinuoso. Unas alambradas cerraban mi recorrido habitual debido a unas obras de canalización por las márgenes del río. Cambié de recorrido y superé el primer obstáculo. El segundo fueron las fiestas de O Burgo. Cientos de personas caminaban hacia las atracciones de feria, obligándome a detenerme para no tropezar. Di la vuelta y volví hacia casa probando otro camino, esperando que no estuviera cortado. Al pasar por una zona oscura vi algo que brillaba en el suelo. Pasé de largo y seguía brillando, por lo que no era un reflejo. Paré, me acerqué y descubrí a una luciérnaga brillando en la oscuridad. Seguí corriendo bajo la luna llena, terminando completamente empapado de sudor, más por el calor que por el esfuerzo realizado.

miércoles, 14 de julio de 2010

Entrenar al mediodía no es para mí

Hoy he salido a trotar con un compañero de trabajo. Era mediodía y, aunque no hacía mucho calor, a mitad de trayecto se fueron las nubes y volvió a salir el sol con su implacable calor. No fue tan duro como el otro día pero, entre que salimos demasiado rápido para mi maltrecho estado de forma, el calor de los últimos kilómetros y que fuimos hablando todo el camino, llegué casi sin fuelle al final de los 10 km de entrenamiento. Está claro: cada uno tiene un momento ideal para entrenar y el mediodía no es el mío.

lunes, 12 de julio de 2010

12 de JULIO

Dos días buscando la libreta donde tengo anotado el plan de entrenos y, al final, la encontré ¡en su sitio! debajo de una prenda de ropa. Hoy he hecho 10 km. Uno y medio de calentamiento, 7 de ritmo fuerte (que me han salido a 4'50"/km de media), y uno y medio de enfriamiento. Para mí es un buen entreno.

A pesar de que estamos a 12 de julio, el cielo estaba nublado y chispeaba un poco. Al acercarme a la ría vi una pareja de cisnes con cuatro pollos ya creciditos. Al terminar el entreno, se puso a llover.

Mi cuñado ha terminado el Ironman de Klagenfurt, en Austria. Era su debut en un Ironman y también en la distancia de Maratón. Por lo que me comentaba, no hizo un entreno muy específico para maratón, sino que «salía a correr dos o tres veces a la semana». Me ha dado que pensar acerca de las tremendas palizas que nos metemos para preparar los maratones. Mi cuñado ha debutado en maratón después de meterle al cuerpo 3,8 km nadando y 180 km de bici. Ha estado más de 15 horas dándole caña al cuerpo. ¡Alucinante!

viernes, 9 de julio de 2010

Me costó arrancar pero estoy en marcha de nuevo

No quería contar que había vuelto a los entrenos hasta que fuera algo más que buenas intenciones. Ésta es la segunda semana que salgo a correr de manera regular, siguiendo un plan de entrenamientos. He enlazado dos planes diseñados por Martín Fiz. El primero de medio maratón y el segundo de maratón entero, pensando en el maratón de Oporto. He hecho rodajes de algo más de 10 km, series de 1000, interval, etc.

Como novedad,tengo un compañero nuevo en la oficina que también es corredor (de 4'/km). Salí a rodar un día con él y casi me dejo los hígados por el camino. Ahora voy a pasar 3 semanas de Rodríguez y dedicaré muchos días a correr. En estos momentos estoy con la familia en la playa, escribiendo en la PDA, por lo que pido disculpas si falta o sobra alguna letra.